Como mucha gente bien sabrá, en este nuevo año que acabamos de empezar se aplican muchos cambios en el ámbito fiscal, con la ya famosa reforma fiscal. En esta serie intentaremos explicar los puntos más relevantes. Atentos porque se acercan mejoras positivas para nuestro bolsillo. En este primer artículo abarcamos uno de los principales cambios de la reforma fiscal y que antes deberíamos tener presente, las nuevas retenciones de IRPF en las facturas de alquiler de local, ya que muchos de vosotros ya habréis podido apreciar variaciones en las facturas de enero.

IRPF e IVA los impuestos de una factura de arrendamiento de local.

Como todos bien sabéis, los impuestos que pueden intervenir en una factura de alquiler de un local son:

• En primer lugar está el IVA que en las facturas de alquiler es de 21% sobre la base imponible y se mantienen para el 2015.

• Las retenciones en IRPF, estas retenciones aparecerán en facturas cuando el arrendador (propietario) sea una persona física y el arrendatario esté incluido en alguno de los supuestos del artículo 76 del reglamento del IRPF. Es aquí donde se produce el cambio fiscal para el 2015.

¿Qué son las retenciones en IRPF?

Las retenciones son simplemente pagos a cuenta del impuesto sobre la renta que realizamos durante un ejercicio y que nos podremos descontar cuando presentemos la declaración de la renta de dicho ejercicio. Hay que tener en cuenta que el funcionamiento de las retenciones es el siguiente: cuando alquilamos un local sujeto a retención, somos nosotros los responsables de actuar como recaudadores e ingresar las retenciones que se hayan practicado en cada trimestre, en el modelo 115 de Hacienda. Estos serán los pagos a cuenta que el dueño del local adelanta a Hacienda en concepto de IRPF correspondiente a la renta del alquiler de su inmueble.

Los cambios en las retenciones en IRPF para el 2015.

Uno de los primeros efectos que notaremos en la aplicación de la reforma ( los que estamos alquilando un local para nuestra actividad económica), será que las facturas de alquiler cambiarán, cambio debido a que las retenciones en IRPF pasan de un 21% a un 20%. Esto equivale a que, si no se ha cambiado la base imponible del alquiler, esta factura será un poco más cara, exactamente 1% más. Pero al mismo tiempo el importe a ingresar trimestralmente en el 115 por el arrendatario se verá reducido en la misma proporción. Es importante que si no se llevan acabo dichos cambios en las facturas se contacte con un asesor fiscal para adaptarse lo antes posible a la reforma fiscal.

¿Cuáles son las ventajas de esta bajada si el inquilino tiene que pagar más?

Muy sencillo: aunque yo al propietario le tenga que pagar un poquito más, él tendrá que ingresar a cuenta un 1% menos en hacienda, por lo que sus ingresos se verán incrementados en este porcentaje, así, es una reforma que afecta positivamente a los propietarios de los locales en alquiler sujetos a este impuesto.

Para concluir, debemos saber que rebajar las retenciones no equivale a una rebaja de impuestos, pero sí es una manera de rebajar los pagos a cuenta durante el año para los contribuyentes. Las rebajas en IRPF que se aplican el la reforma fiscal las abarcaremos en un próximo artículo.